El sueño de la casa propia { parte I }

Siempre soñé con tener mi casa. 

Pero era un sueño más parecido a: "me encantaría que Javier Bardem me dé bola" que a algo real ya que, los únicos grandes ahorros que había podido juntar durante toda mi vida, los había patinado en el 98 cuando me fuí a vivir 6 meses a Francia con mi ex novio francés de aquella memorable época!! 

Y sí chicas, en ese viaje, no escatimé en gastos!!! 

Recorrer Europa, cenar afuera, cine, y más paseos por el viejo mundo me dejaron seca de nuevo (pero con unos de los 6 meses más hermosos de mi vida!!)...

Cuando regresé a Argentina, encontré trabajo nuevamente (y rápidamente) y empecé a ahorrar de nuevo, pero, por la situación de aquella época, podía hacerlo con demasiada lentitud (para mi gusto).

Como venía la mano, no iba a llegar nunca a juntar lo necesario para la casa propia ni en pedo!! Pero igual las esperanzas nunca las perdí (es lo último que pierdo ante situaciones así!!)

Cuestión que después de esa época se sucedieron, cronológicamente, situaciones diversas en mi vida laboral (y sentimental también), a saber:

- nuevo trabajo.

- renuncia a ese trabajo, 

- nuevo trabajo en el sur, 

- renuncia al trabajo del sur, 

- dificultad para encontrar trabajo en Bs As (con la consiguiente utilización de algunos pocos ahorros que había logrado conseguir), 

- nuevo trabajo pedorro en Bs As, más precisamente en el hall del aeropuerto internacional de Ezeiza, ofreciendo a los gritos (literalmente) taxi a todo aquel pasajero que tuviera la valentía de acercarse a ese stand atendido por tres locas que gritaban "taxi" a viva voz (pero trabajo al fin), 

- despido del trabajo pedorro ya que la "querida" del dueño del stand estaba celosa de mi y creía que yo quería algo con el "horrible y desagradable no te toco ni con un palo pero con $$$$" novio de ella, 

- kilombo del 2001, 

- nuevo trabajo mal pago, 

- mudanza a capital para vivir sola, 

- gastos de mujer independiente, 

- embarazo sorpresivo, 

- nacimiento deseado, 

- mudanza a casa más grande con hija y papá de hija, 

- gastos acordes a un bebé que come y caga, 

- despido del trabajo, 

- pobre indemnización por pelotudez mía y proceso de separación.

Toda esta movidita etapa de mi vida culmina en marzo del 2007 donde me encuentro separada y con:

- alquiler de casa a pagar con niña pequeña que mantener. (alquiler que sigo pagando hoy día)

- ni un peso que repartir de la separación ya que, tanto J. como yo, habíamos entrado pobres a la convivencia y habíamos salido en iguales condiciones de ella.

- indemnización casi agotada.

- nuevo trabajo como maestra jardinera con sueldo que sería usado para cubrir gastos y

- un negocio en Etsy al que yo le tenía toda la fe, cuyos ingreson podían usarse para guardar en el chanchito, pero que avanzaba a paso de tortuga...

Agregado: cabe destacar que, cuando empecé en Etsy sentí que había encontrado el "trabajo" que amaba hacer!!! Tuve tantos trabajos durante toda mi vida y, si bien en algunos me sentí contenta y los disfruté, sentía que, de algún modo, no eran lo que quería hacer el resto de mi vida. La orfebrería es "mi trabajo"!! Es la primera vez en mi vida que me levanto a las 7 de la mañana sin chistar y feliz para sentarme a trabajar en mi taller!!!

 Y, estoy segura que fue porque mi deseo era tan fuerte y porque estaba segura de que las cosas que hacía eran dignas de ser compradas por todo el mundo (a través de Etsy) que, la cosa, así como "redepente" empezó a irme de maravilla y pude ahorrar lo suficiente como para, a fines del año pasado, terminar de pagar el lote en Maschwitz.

Agregado: En el 2009 renuncié a mi trabajo de maestra jardinera y, desde entonces, sólo trabajo de manera independiente en algo que amo hacer y que vendo en mi negocio en Etsy, y, lo mejor de todo, es que tengo todo el tiempo del mundo para estar con India!!!

Y estoy orgullosa de haberlo hecho sola.

Y no lo comparto para hacerme la linda y la importante.

Lo comparto para dejar constancia que, si una mujer como yo, maestra jardinera, sin ningún master rimbombante o sin un coeficiente intelectual excepcional pudo lograrlo, muchas de ustedes que están ahí, leyéndome, también pueden lograr lo que se propongan.

Es sólo cuestión de actitud, perseverancia, seguridad y necesidad.

No es tan difiícil, (tampoco taaannnnn fácil, no voy a mentirles).

Pero si es posible.

De cómo estoy juntando el dinero para construir, lo dejo para el capítulo siguiente....